En Hechos 9:3-6 podemos encontrar la historia del Apostol Pablo, la cual comienza con suposiciones, veamos:
Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón. El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. (RVR60)
Pablo daba por cierto que estaba haciendo lo correcto. El supuso y hasta tenia la certeza de que los seguidores de Jesús eran era una amenaza en contra de sus costumbres, tradiciones y religión. Sin embargo cuando tuvo un encuentro con la verdad (Jesucristo), sus ojos fueron abiertos y comenzó a ver las cosas como realmente eran.
La suposición es algo que nubla nuestra mente y evita que veamos la realidad de las cosas. Por eso es importante procurar una comunicación efectiva. Si lees la historia completa te darás cuenta que después de un tiempo de persecución Jesús decide tener una conversación con Pablo. Volvamos a los versículos 3 al 6 de Hechos 9 y veamos lo siguiente:
Dice que; “oyó una voz”; Jesus estableció comunicación,
Y "la voz" dijo; “Porque me persigues”; Jesús le confronto, la confrontación es necesaria, nosotros la evitamos y en ocasiones preferimos llevar esas emociones negativas que son una carga pesada, y que vienen acompañadas con la suposición.
“Quien eres Señor”; Pablo se expone y procura una respuesta,
Luego Jesús le responde; “yo soy Jesus a quien tu persigues…”; con esto dicho Jesús le aclaro sus suposiciones.
Y Pablo le responde: “¿Que quieres que yo haga?”; aquí vemos a Pablo arrepentido y pidiendo perdón.
Luego Jesús le dice: “Levántate y entra en la ciudad y se te dirá lo que debes hacer”; las instrucciones del Señor siempre nos llevaran a caminar en un propósito que implica la unidad del cuerpo de Cristo.
Esto para mi es muy real, personalmente he sido víctima de las suposiciones una y otra vez. Pero; ¿Que es la suposición? Suponer es una deducción sin fundamento, es llegar a dar algo por cierto, basado en lo que formulamos en el pensamiento. Creo que a todos nos ataca las suposiciones, y no estoy hablando de aquellos que suponen para formular chismes, sino de aquellos que son víctimas por causa de su buen corazón. Hablo de esos pensamientos que lleguen cuando vemos una actitud rara de una persona que amamos, o quizás la preocupación que llega cuando leemos algo en las redes y pensamos; “¿Que abre dicho?, o ¿Que abre hecho?” No estoy hablando de complejos, o de un espíritu de persecución, ¡NO! Estoy hablando de una preocupación legitima que viene de un corazón puro y la preocupación parece ser genuina, pero no lo es, mas bien son pensamientos y situaciones creadas por el enemigo, pero mas que todo son causadas por nuestros propios pensamientos que nos traicionan y nos lleva a suponer, te lo digo por experiencia… :0(
¿Porque Suponemos?
Les dije que suponer es una deducción sin fundamento, es llegar a dar algo por cierto, basado en lo que formulamos en el pensamiento. Como modo de sobre-vivencia una de las funciones del celebro es crear ideas acerca del mundo que nos rodea, ideas basadas en lo que vemos o escuchamos, pero eso no siempre son precisas, esas ideas son historias, que crea el celebro para llenar los blancos.
Si nos dejamos llevar por lo que parece ser, dejamos de ser objetivos, y nuestras relaciones interpersonales se ven afectadas, y yo no se de ti pero eso personalmente me afecta mucho, es abrumador y muy agotador.
Ahora si sumergimos nuestros pensamientos y emociones en la Palabra de manera constante, encontraremos descanso y paz. Porque la mente siempre busca la manera de resolver cada situación para poder regresar a un lugar de seguridad emocional, pero la dirección de ese lugar lo encontramos en Jesús, él dijo: “Yo soy el camino y la verdad” (Juan 14:6 RVR60) La verdad no siempre nos consuela, pero de seguro nos afirma.
Se libre de la suposición haciendo estas 3 cosas (Esto es lo que yo he tenido que hacer).
Enfócate. Hazte estas preguntas: ¿lo que estoy pensando es realmente basado en alguna realidad objetiva o estoy simplemente imaginando y llenando los espacios en blanco? Ejemplo; no fuiste incluido en la lista de invitados, y la persona se le olvido, o se le extravío la invitación y pensó que te la dio. Sin embargo la mente te dice; “no te quisieron invitar”, “no te quieren allí”… Sabiendo que son suposiciones; ¿Que podemos hacer? Entender lo que nos dice 2 Corintios 10:4-5 LBLA; “porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos (especulaciones, suposiciones) y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,”
Entrena tu mente a crear múltiples posibilidades positivas. Mientras mas pensamos en algo mas realidad se hace, y si esos pensamientos son negativos, nuestra mente creara escenas negativas. Convierte tus suposiciones en posibilidades positivas, si cambiamos nuestro lenguaje, de una declaración (que implica verdad) a una pregunta (que implica posibilidades), tendremos mejores resultados. Filipenses 4:8 TLA dice; “Finalmente, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, en todo lo que merece respeto, en todo lo que es justo y bueno; piensen en todo lo que se reconoce como una virtud, y en todo lo que es agradable y merece ser alabado.”
Toma la iniciativa, no temas, en el amor no hay temor. Siempre tenemos la opción de hacer algo, pero procura que ese algo sea positivo, si somos malentendidos o quizás ignorados quizás sea porque nuestra relación haz estado presente o no haz mostrado interés. Comuníquese, hable con las personas clara y directamente, haga sus preguntas, pero por favor desecha tus pensamientos negativos. Ve con una actitud positiva. Efesios 4:31-32 TLA nos dice: “Dejen de estar tristes y enojados. No griten ni insulten a los demás. Dejen de hacer el mal. Por el contrario, sean buenos y compasivos los unos con los otros, y perdónense, así como Dios los perdonó a ustedes por medio de Cristo.
Después de haber sido golpeado y agotado por la suposición me decidí a practicar estas cosas para procesar y manejar mis pensamientos de manera positiva. Y puedo sentir como estoy siendo cada día transformado por medio de la renovación de mi entendimiento. Porque podemos intentar muchas cosas pero no hay nada mejor que nos pueda dar estabilidad emocional como la Palabra de Dios.
En este video encontrarás el mensaje completo.